La televisión, las revistas, internet y la publicidad se encargan de hacernos llegar lo último en decoración. Así resulta muy fácil caer en la tentación de cambiar todo cada temporada siguiendo las tendencias.
A pesar de los cambios constantes en la decoración, hay elementos, muebles y objetos que son atemporales, que no pasan de moda y que encajan a la perfección en todos los estilos de decoración.
Entre estos carismáticos objetos destacan:
- Las librerías para el salón son siempre intemporales.
- Una chimenea francesa en el salón que ayude a crear un clima súper relajante.
- Las molduras en el techo para magnificar los espacios.
- Un buen proyecto de iluminación, que a través de focos en el techo y luces situadas en sitios adecuados que creen diferentes ambientes y logra intimidad.
- Unos suelos de madera siempre convences, los formatos antiguos de espiguilla, o con lamas anchas son lo más.
- Espejos con marcos tradicionales y tamaños King size, quedan perfectamente integrados en espacios contemporáneos. Un sofá Chester que nos transporte al siglo XIX en Inglaterra. Nunca pierde valor, es más el de piel cuarteada se ha convertido en símbolo de una de las tendencias de moda «el shabby chic».
- Las cocinas en blanco, armarios, encimeras y paredes en blanco. Transmiten luminosidad y orden.
- Unas cortinas de lino en colores claros, un clásico en boga por su sencillez y pureza.
- Manteles de hilo imprescindibles en un comedor.
- Una cómoda antigua que emane glamour e historia.
- El cristal no pasa de moda nunca: jarras, copas, bomboneras… aportan encanto y misterio y su ligereza viste con elegancia una mesa.
- Si tienes mármol en el baño, has acertado plenamente.
Fuente:nuevo-estilo.micasarevista.com
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