El mimbre es un fibra vegetal que se obtiene de un arbusto de la familia de los sauces y que se teje para crear mueble, cestos y otros objetos.
Desde la Edad Media y hasta el siglo XVIII se mantuvo la destreza en la cestería utilizando mimbre. Al comenzar el siglo XX el cultivo se desarrolló nuevamente con fuerza en toda Europa. En la actualidad existen muy pocos países dedicados al cultivo del mimbre y a la fabricación de cestos y muebles de esta fibra.
Decorar con MIMBRE es una tendencia que a medida que se acerca el buen tiempo resurge con fuerza. Hay todo tipo de muebles, lámparas, sillas, cestos en los que lo primordial es la naturalidad y la ligereza, con un carácter de sostenibilidad y respeto con el medio ambiente.
Hay infinidad de posibilidades para decorar con mimbre, consiguiendo estancias llenas de luz y calidez, consiguiendo ambientes con un aire rural y tradicional.
Los muebles de mimbre son perfectos para decorar la terraza, balcón o un patio y un acierto seguro si estás buscando un accesorio de almacenaje que sea a la vez decorativo. Cestas de mimbre, revisteros, sillas, cunas….
Cuidado y limpieza
Si los muebles están en el exterior, es necesario que se humedezca de vez en cuando con un pulverizador de agua, así se consigue mantener la belleza y la flexibilidad del mimbre.
Si los muebles están en el interior, su mantenimiento es fácil, con eliminar el polvo y pasar un paño húmedo para cuidar la superficie es suficiente.
A tener en cuenta
El mimbre no es resistente al agua, por lo que el moho y los hongos pueden complicar su uso en zonas descubiertas, ya que las condiciones climáticas pueden dañar el material.