Un sillón es un asiento con respaldo, implicando apoyos laterales para los brazos, comúnmente llamados con el nombre de brazos o apoyabrazos, y que adicionalmente aporta una mayor comodidad y espacio al usuario que un asiento convencional.
En la época de Luis XIII (1610-1643)
El sillón tiene un asiento bajo para el trabajo o las comidas, mientras que el sillón de descanso tiene un asiento más alto y ligeramente invertido hacia atrás. Es más cómodo que una silla gracias a la aparición de las bolas de pelo cubiertas de tela, tapicería o cuero. Las patas son generalmente de madera vuelta, en serie o en columna espiral, todo ello reforzado por un soporte en H. Los brazos son rectos y planos incluyendo a veces puños muy rellenos.
En la época de Luis XIV (1961-1715)
El asiento es más elevado e invertido hacia atrás. La base se amplía y se profundiza. Las patas se tallan más, la forma en hueso de oveja tiene mucho éxito. El soporte horizontal siempre necesario pasa en esta época progresivamente de una forma en H a una forma en X. El apoyo de los brazos es más ondulado y sobrepasa la consola que lo soporta. La estructura de apoyo se forma como una prolongación de la pata. Incluye a veces puños.
Regencia (1715-1723)
El sillón gana en comodidad y en finura en la escultura de la madera. Se cargan menos los tejidos. El asiento es más bajo y su parte superior se redondea, pero su forma sigue siendo recta.
En la época de Luis XV (1723-1774)
Las formas se multiplican con la aparición de diferentes modelos de sillones. El sillón es aún más cómodo gracias a la aparición del asiento cóncavo. Los apoyos de los brazos retroceden aún más. Los pies y los soportes incluyen finas molduras y esculturas asimétricas cada vez más variadas.
Fuente: es.wikipedia.org
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