El salón, es una habitación dedicada a recibir visitas, leer, ver la televisión o realizar otras actividades. Se trata de una habitación confortable además de acogedora en donde se concentra la actividad familiar.
Actualmente, dado el menor tamaño de las viviendas, se utiliza el salón tanto para la función pública como privada.
Si quieres que tu salín sea un lugar cómodo y diáfano sigue estos pasos:
- La luminosidad es una de las variables que más influyen para que un espacio parezca más grande.
- La iluminación artificial es muy importante, evita un único foco de luz y sustitúyelo por varios de distintas intensidades. Procura dirigir la luz hacia el techo y así aumentarás la profundidad.
- Colores pastel y beiges son ideales para nuestro salón. Los tonos claros reflejan la luz y ayudan a que se reparta por la casa.
- Introduce algún elementos un poco más oscuro para crear mayor profundidad visual, puedes probar con las cortinas o estores.
- Un salón no debe tener accesorios innecesarios, con unos armarios donde tener todo ordenado será suficiente, puedes elegir por módulos que son fáciles de adaptar a los huecos disponibles.
- Busca materiales que no resulte pesados, utiliza sillones, sofás y cómodas que dejen un hueco debajo, así aportarás liviandad al conjunto.
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