Sin duda es uno trabajo que te llenará de ilusión, elegir cada detalle que pasará a formar parte del día a día de nuestro bebé será muy satisfactorio.
Pero lo importante es que la habitación resulte cómoda y bonita:
- Para la pared elige un color que aporte calidez, que relaje y que apetezca estar en la habitación. Recuerda que los colores influyen en los estados de ánimo. Una habitación infantil debe tener un color suave.
- Busca un sitio que te resulte cómodo para colocar la bañera y el cambiador del bebé con todo lo necesario para su aseo diario.
- Coloca muebles que crezcan con él y que se adapten a las diferentes edades del niño.
- No te olvides de dejar una zona de juegos, que aunque parece muy precipitado en este momento, en unos meses la estarás utilizando.
- Como lo que más hay en una habitación infantil son juguetes, hace necesario un sitio (cajónes, baúles, cestas), donde guardar los objetos que se usen de forma habitual.
- Ten presente que la época de bebé pasa muy rápido y enseguida llega la edad de los cuentos y libros que inundarán la habitación. No te olvides de colocar una estantería que te permita mantener el orden. Si te atreves, puedes optar por estanterías con formas o dibujos originales que te permitan crear un conjunto divertido para una habitación infantil.
- Importantísimo un sillón, taburete, silla…, un sitio lo ideal sería que de alguna forma se pudiera guardar en su interior los zapatos, zapatillas, tenis…
Si estás esperando un bebé procura no dejar para los últimos días todo el trabajo, lo mejor es que poco a poco la completes para cuando llegue el bebé. Además tendrás más tiempo por si se te olvida algo.
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