La cuestión es fácil ¿lo necesitas o no?. La conclusión a la que llegamos es que guardamos más cosas de las que realmente necesitamos.
Hay que tener claro lo que se inútil, lo que ya no necesitamos o lo que acumulamos sin apenas darnos cuenta, periódicos antiguos, electrodomésticos estropeados, correo comercial… seguro que en tu casa hay un montón de objetos que ocupan espacio y que se acumulan sin ninguna utilidad.
Es importante aprender a tirar y para entrenar puedes empezar con los objetos a los que te una un vínculo emocional, por ejemplo fotos antiguas, ropa, libros… Procura no dejar las cosas para otro día o para más tarde. Si tienes claro que una cosa no te sirve para nada, tírala sin piedad.
Evitar llevar a otras ubicaciones «trastero» objetos porque que da pena tirarlos. Ni los escondas en el fondo del armario, así lo que haces es esconder el problema o retrasar el proceso.
Los objetos que ya han cumplido su función, tíralos. Por ejemplo catálogos antiguos, manuales de instrucciones, documentos con garantías , etc.
Tirar no solo libera espacio en nuestra casa, también nos ayuda a desprendernos del pasado y mantener la mente activa.
Fuente: elmueble.com
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